miércoles, 21 de noviembre de 2007

Relato Begoña

Estaban en la habitación nº 13 de una pensión céntrica, acababan de llegar a la ciudad que aún estaba dormida, y se habían tumbado en la cama, una al lado de la otra, mirando los dibujos de la tele, mientras hacían tiempo para salir a recorrer la ciudad.
Le gustaba como recorría sus manos con su dedo índice, cómo si las estuviera dibujando, apenas se conocían, era la segunda vez que se veían, pero habían conectado en el mismo momento en que se encontraron, hacía tan solo una semana, la miró a los ojos, le gustaba esa mirada irreverente, propia de la juventud, y buscó en ellos el reconocimiento del deseo, le dio un beso suave en la boca, y ella comenzó a dibujar círculos en su estomago y poco a poco la forma de sus costillas y su pecho, la atrajo hacía ella, acariciando la curva de sus caderas, su espalda, y la beso con pasión ya sin contener, ella buscaba sus pechos bajo la camiseta, y se enredaron en un mar de caricias, que buscaban reconocer ese cuerpo deseado, se despojaron de las camisetas dejando sus pechos al descubierto y comenzó a besarlos lentamente, jugando con su lengua en su pezón erecto, bajo beso a beso hasta su ombligo, sus dedos buscaban el botón del pantalón, los desabrocho, y poco a poco la despojo de sus pantalones, se quitó los suyos mientras admiraba su blanco cuerpo tumbado en la cama, esperándola, acarició sus muslos, beso su tobillos, y ascendió beso a beso, hasta su sexo, abierto cómo una flor, lo beso y jugo con su lengua por sus labios húmedos, noto cómo se estremecía en un gemido mudo, ella la cogió de la cabeza arrastrándola hasta su boca, sus manos buscaron al unísono el sexo de la otra, y comenzaron un baile rítmico, notaba sus uñas clavándose en su espalda, su boca mordiendo sus hombros ahogando un gemido de placer, se tensaron sus músculos en un último grito de placer, la puerta se abrió y tan sólo tuvieron tiempo de ver una mano que se tapaba la boca, mientras con la otra sujetaba las toallas limpias, con el ruido de la puerta al cerrarse estallarón en una carcajada, -coño que yo soy la que he dejado el carnet- dijo ella azorada, - no te preocupes si deben de estar acostumbradas- contestó aún riendose.

6 comentarios:

No sólo sexo dijo...

Oye que si es autobiografico tienes por ahi mi mail!

jeja =P

KaTchoo dijo...

jajajaja %-)))) no soy tu tipo q soy madurita jajajajaja

Jesús dijo...

Muy bueno Begoña!

KaTchoo dijo...

Ainss gracias :-DDDDD

Cat dijo...

Genial, veo que la gente se anima!!!

KaTchoo dijo...

No se anima nadie mas? Oohhh!!!